LOS RETOS QUE IMPLICA EL TRABAJO DOCENTE EN TELESECUNDARIA

Retos que implica el trabajo docente en la escuela telesecundaria.

Difícil es el camino para llegar a ser maestros verdaderamente de excelencia, creo que alguna vez todos tuvimos la suerte de toparnos con alguno de ellos, aquel profesor que daba una clase ejemplar, donde muchos de nosotros esperábamos con entusiasmo su llegada para aprender nuevas cosas de una manera diferente, donde sentíamos la confianza para expresar nuestras ideas y donde nunca faltaba alguna frase divertida para amenizar el momento, donde ninguno de nuestros compañeros de clase se ausentaba, pues tomar esa clase era la recompensa de tener muchas más donde pasaba todo lo contrario.

Ser docente no es una tarea fácil, mucho menos en la escuela telesecundaria pues los alumnos que asisten a ella se encuentran en una edad donde experimentan diversos y notables cambios tanto físicos como emocionales, muchas de las veces estos cambios hacen que los adolescentes no sepan hacia dónde dirigirse, qué camino elegir, y cómo seguirlo; es ahí donde vienen situaciones difíciles de tratar, pero no imposibles, donde nosotros como docentes vamos a intervenir para mejorar esas actitudes que de cierta manera afectan a la mayoría de los alumnos ya sea por problemas emocionales, físicos ó psicológicos. Es ahí donde comienza uno de los principales retos, no solo ser para nuestros alumnos simplemente maestros sino incrementar esta profesión convirtiéndonos también en amigos y consejeros, en guías y orientadores, en algo más que simples expositores de información.

Otro de los retos que implica el trabajar en la escuela telesecundaria y que para mí es uno de los más importantes es, ser para nuestros alumnos lo que significó para nosotros ese maestro del cual hablé al principio del texto. Nuestro trabajo no es solo dar a nuestros discentes meramente conocimientos, pues uno de los propósitos incluidos en la nueva reforma indica que la educación debe centrarse en el aprendizaje más que en la enseñanza de contenidos y en el alumno más que en la disciplina, plantarnos un buen reto como docentes significa no hacer de los alumnos máquinas reproductoras de información, sino también prepararlos para la vida, para que sean competentes y personas de bien, ser maestro de educación secundaria significa contribuir al desarrollo personal de nuestros educandos, conducirlos por el camino adecuado, dependerá de nosotros que esto se lleve a cabo, es ahí donde se encuentran nuestros verdaderos retos como profesores, que podamos cumplirlos dependerá de nuestra formación, de las ganas que tengamos por ser para nuestros discentes un ejemplo y contribuir en ellos para su desarrollo como personas.

Al realizar el presente ensayo me fue importante destacar los retos que tengo yo como persona y como futura docente de manera particular, pues el escrito está más apegado a los maestros en general; estos retos personales son:

· Utilizar la empatía, como un valor que me facilitará acercarme más a los alumnos.

· Preocuparme por lo que a ellos les inquieta, lo que les llama la atención, lo que no, sus dificultades, lo que les gusta hacer y lo que no, entre otras cosas.

· Compartir con ellos dificultades, retos, metas, en fin; pues así trabajaremos a la par y de manera igualitaria.

CLAUDIA MONSERRAT CASAS FLORES